EN PALESTINA NO HAY UNA GUERRA, HAY GENOCIDIO

¡FUERA MEKOROT!

LOS TERRITORIOS SON VIDA, NO NEGOCIOS CAPITALISTAS

Octubre de 2023

Desde la Unión de Asambleas de Comunidades repudiamos el genocidio desatado sobre la población palestina por el estado de Israel en estas últimas semanas. Los dirigentes políticos y militares de este país lo han proclamado abiertamente y lo están ejecutando con miles de bombas y municiones prohibidas. Sin embargo, el ataque no es sólo militar. La población palestina de la Franja de Gaza tiene cortado el acceso al agua, el alimento, la electricidad y la medicina, viéndose obligada a desplazarse hacia el sur.

El brutal ataque de Hamas, que repudiamos, es consecuencia de una larga historia de múltiples violencias ejercidas contra ese pueblo por parte de Israel. Basta hacer un breve recuento de esa historia que se inicia con la creación del estado de Israel en 1948, que implicó, para la población palestina, desalojos brutales y expulsión de sus tierras, mecanismos desatados por el gobierno sionista recién constituido. El nuevo estado, formado con el 55% del territorio de Palestina por decisión de la ONU, no paró de extenderse hasta incorporar el 78% del mismo.

Las numerosas guerras que permitieron esa expansión no fueron los únicos métodos desplegados. La formación de asentamientos o colonias israelíes desde la década de 1960 implicó la colonización de tierras en Cisjordania y la Franja de Gaza, desplazando población palestina en forma permanente. En ese sentido, Amnistía Internacional declaró en 2022 que luego de 74 años de expulsión de sus territorios, continúan los desplazamientos de la población palestina, aumentando el número de gente refugiada, que hoy son entre 5 y 6 millones de personas.

El estado de Israel ejerce un verdadero apartheid sobre el pueblo palestino y en este sentido ya hemos denunciado en otra declaración que la Compañía Nacional de Agua de Israel, Mekorot, ha sido acusada de aplicar una política de apartheid del agua contra el pueblo palestino. La empresa ejerce un uso discriminatorio del agua, restringiendo el suministro a las comunidades palestinas en beneficio de los colonos israelíes en los territorios ocupados de Cisjordania, La Franja de Gaza y Jerusalén. Ya en los años 2013 y 2014, dos informes de Naciones Unidas denunciaron a la empresa por el uso violento y arbitrario del agua y la violación de derechos de la población palestina.

En esa oportunidad, desde la UAC, también denunciamos al gobierno nacional argentino y a varios gobiernos provinciales por haber cerrado convenios con la empresa israelí para implementar Planes Maestros del Sector Hídrico, que no son otra cosa que medios para mercantilizar y privatizar el agua y encauzarla hacia la profundización del extractivismo en todas sus formas (puede verse el comunicado que publicamos en marzo sobre este tema: https://asambleasdecomunidades.org.ar/2023/03/el-agua-es-un-derecho-no-una-mercancia-anda-palla-mekorot/).

El estado de Israel tiene una larga historia de violencias contra el pueblo palestino y hoy está protagonizando un genocidio fuertemente repudiado por los más diversos sectores sociales y políticos a nivel global. Como lo vienen haciendo multitudes en el mundo -hasta en el propio estado de Israel- y a pesar de que los de arriba quieran callarnos, desde la UAC nos sumamos a las voces de repudio, diciendo:

-Detengan el genocidio en Palestina!

-Cese del fuego ya!

-Palestina libre!

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